NUESTRO HUERTO

Seguimos echando de menos “Nuestro Huerto” y seguimos imaginando como estará:

Maricarmen

Este es el huerto que yo creo, que va a estar muy bien cuidado y muy vivo, la verdad. Va a estar muy bonito y con muchas verduras plantadas. Me imagino tomates, lechugas… creciendo muy bien, si se cuidan claro.

Querida Maricarmen:

Eres muy optimista y eso dice mucho de
ti, eres positiva y ves el lado bueno de las cosas y tu imaginación es fantástica.
La realidad es bien distinta. Durante el confinamiento nadie ha podido ocuparse del huerto y no está en su mejor momento, ahora bien, seguro que pronto volveremos a verlo como a ti te gustaría.
Angelines.




Alba

Imagino que el huerto estará
en muy malas condiciones,
seco y las plantas secas sin
crecer y estropeadas por los
pájaros y llenas de hierbas.







Angelines

08/05/2020

La imaginación es libre y felicito a Maricarme y Alba por hacer el esfuerzo de dejarla volar y contarnos sus impresiones. Yo me voy a permitir hoy aportar pero sin imaginar, tengo ventaja y como ya se puede ir unas horas a cuidar de los huertos, estuve ayer en el nuestro y esto es lo que vi:

Cuando se inició el estado de alarma, en nuestro huerto quedaron plantados ajos y cebollas y se estaba preparando la tierra para plantar la nueva temporada, pero no dio tiempo plantar nada nuevo. Los ajos han crecido tanto que ya no sirven para tiernos y hay que dejarlos ya para secos, si es que las hierbas que los rodean los dejan…



Las cebollas ayudadas por las
lluvias del mes de abril se ven
así:

¡Están estupendas para su
recogida y consumo!

Así que ¡manos a la obra!



Con la ayuda de un voluntario sacamos de la
tierra unos 20 kilos de cebollas.

Tres cajas como esta
conseguimos llenar.

Después toca limpiarlas un
poco de tallos, raíces,
tierra y ¡hormigas!

Y os preguntaréis: ¿dónde están los 20 kilos de cebollas?

Pues bien, la mayor parte de ellas se han donado a quien podía aprovecharlas, algunas a través de Antonio Villacañas, que sabéis todos que es el responsable de los huertos y que muchas veces nos ayuda con el nuestro, se entregaron a la parroquia para preparar lotes de alimentos para familias que van un poco apuradas estos días y unas poquitas están…….. ¡en mi casa!
Cuando las pruebe os cuento que tal saben.